Cuando se trata de averiguar cuánto usar y con qué frecuencia, varía de persona a persona.
Tomemos el ejemplo de 2 hombres adultos de unos cuarenta años de forma y tamaño corporal similares que lucharon contra el insomnio y, por lo demás, estaban sanos y no tenían otros problemas médicos. No estaban tomando medicamentos recetados. Ambos usaron exactamente el mismo producto de CBD. Uno necesitaba 2,5 mg para dormir mejor y el otro necesitaba 50 mg de CBD para dormir mejor. Y eso es todo: ¡pueden existir grandes variaciones en los miligramos de CBD que se necesitan de persona a persona!
Consulta siempre con tu médico u otros profesionales de la salud calificados antes de tomar cualquier tipo de producto de CBD. Si ya estás tomando múltiples medicamentos, esto es particularmente importante.
Si tu médico no recomienda una dosis especifica inicialmente, es mejor comenzar con una cantidad pequeña y aumentarla gradualmente. Esto podría significar comenzar con tan solo 1 mg al día. Si necesitas más, aumenta gradualmente la dosis hasta que llegue a su punto óptimo y sientas que está tratando tus síntomas de manera efectiva.
No presta mucha atención a las recomendaciones de dosis de otras personas que usan CBD. Es complicado saber si cierta cantidad es la dosis correcta para un individuo determinado, ya que no tiene en cuenta factores importantes como:
– La concentración de CBD
– El peso del individuo.
– La química corporal del individuo.
– La gravedad de la afección que se está tratando.
Dicho esto, no hay una dosis «única para todos», y habrá algo de prueba y error al medir la dosis adecuada.
En general, es conveniente aspirar a la dosis mínima efectiva. No deseas tomar muy poco, en donde el producto de CBD no es efectivo, pero tampoco deseas tomar demasiado, ya que puedes experimentar los efectos secundarios del CBD. Lo creas o no, el CBD, al igual que cualquier otro medicamento, tiene efectos secundarios, como boca seca, diarrea, reducción del apetito, somnolencia y fatiga, y existe el riesgo de aumentar las enzimas hepáticas en casos muy específicos.
Es lo mismo cuando se trata de la frecuencia de dosificación, queremos conseguir la frecuencia efectiva mínima. En general, existe la idea errónea de que los productos de CBD deben tomarse a diario. Solo en raras ocasiones es necesario tomar productos de CBD a diario. De hecho, puedes optar por tomar productos de CBD cada dos días o incluso tomar productos de CBD solo cuando sientas que lo necesitas. Ten en cuenta que el CBD es liposoluble, se almacena en las células grasas de tu cuerpo. Y durante un período de días, el CBD se libera lentamente en el torrente sanguíneo. Nuevamente, todo depende de la persona, la condición y el CBD necesario para encontrar alivio.
En caso de duda, consulta a tu médico, especialmente si tienes una condición médica existente. Si bien no puede esperar que todos los médicos tengan mucha experiencia con el CBD, la mayoría de los médicos deberían tener una buena idea de cómo reaccionará tu cuerpo al CBD y pueden recomendarte una dosis profesional de CBD para tu situación específica.
¿Cómo medir con precisión mi dosis de CBD?
Sin comprender cómo medir correctamente tu dosis, saber cuánto CBD debes tomar no tiene mucho sentido. Especialmente cuando se trata de todas las diferentes formas de consumir CBD.
Usar una tintura de CBD es una de las formas más fáciles de consumir CBD. Simplemente llena el gotero, administra el aceite debajo de la lengua y mantenlo ahí de 30 a 90 segundos antes de tragar.
La pregunta es, ¿cuántas gotas de aceite de CBD debes tomar?
Míralo de esta manera:
Una gota equivale aproximadamente a 0,05 mililitros (mL). O sea, no un gotero completo, sino una sola gota. Esto significa que una botella de aceite de CBD de 10 ml contiene alrededor de 200 gotas.
Si esa botella de 10 ml contiene 1000 mg (10 %) de CBD, entonces 1 gota contiene 5 mg/CBD (1000/200).
Si deseas tomar 40 mg, eso equivale a 8 gotas.
(Y esa botella de 10 ml durará un mínimo de 25 días. Aunque, esa botella podría durar mucho más dependiendo de la frecuencia de tu dosis de aceite de CBD).
Recuerda, comienza con una dosis pequeña y aumenta gradualmente hasta encontrar la dosis perfecta para ti.
—
Descargo de responsabilidad:
Este contenido está destinado únicamente a fines educativos. La información ofrecida procede de
investigaciones recopiladas por fuentes externas y no son consejos médicos.
